La crisis sociosanitaria producto del Covid-19, ha relevado la importancia de los espacios educativos como un lugar imprescindible para el logro de aprendizajes, el desarrollo socioemocional y la equidad. Planificar la apertura de los establecimientos requiere de responsabilidades compartidas, entre la comunidad educativa, considerando especialmente a las familias.
Es importante saber que, todas las salas cuna, jardines infantiles y escuelas o colegios con niveles de Educación Parvularia, podrán iniciar sus actividades educativas 2021 de forma segura, voluntaria, gradual y flexible, siempre y cuando cuenten con un Plan de Funcionamiento, presentado al Mineduc.
A continuación, presentamos algunas medidas concretas, que apuntan a cumplir con un retorno seguro de las niñas y niños a los establecimientos. Estos son ejemplos, por lo que pueden o no ser de carácter obligatorio, según lo indicado en los protocolos del Mineduc.
1.- PROTOCOLOS SANITARIOS
Limpieza y desinfección de espacios.
-Crear una rutina de limpieza y desinfección de los objetos considerando la frecuencia de roce, usando productos certificados por el Instituto de Salud Pública (ISP).
-Ventilación de salas y espacios comunes.
Higiene y protección personal
-Definir rutinas de lavado de manos para párvulos y personal educativo.
-Uso de mascarillas para el equipo educativo y los niños de niveles en transición.
-Definición de aforos considerando propiciar el metro de distancia.
-Tomar la temperatura a toda persona que ingrese al establecimiento.
Ingreso y salida del establecimiento
-Definir horarios diferidos de entrada y salida del establecimiento, para evitar aglomeraciones.
Uso de patios
-Separar a los párvulos en distintos grupos para que utilicen el patio de manera diferida.
Uso de baños
-Definir rutinas de higiene para el uso de baños y evitar aglomeraciones al interior.
2.- PROTOCOLOS SOSPECHA DE COVID-19
Establecer personas responsables de la activación del protocolo, quienes aíslan a la persona con sospecha de COVID-19 y se comunican con las redes de salud que corresponde al territorio donde se ubica el establecimiento.
Dividir a la comunidad educativa en “grupos” que no tienen contacto ni posibilidades de contagio entre sí, para actuar focalizadamente ante un eventual caso de COVID-19.
3.- ALIMENTACIÓN
Separar a los niños y niñas en grupos y establecer horarios diferidos de alimentación, desinfectando el espacio antes y después de la ingesta.
4.- ORGANIZACIÓN DE LA JORNADA
Realizar actividades presenciales para todos los grupos y niveles o implementar educación mixta (combinación presencial y remota) con medias jornadas presenciales o días alternos.
5.- PLAN DE EDUCACIÓN REMOTA
Definir canales y contenidos de educación remota para aquellos niños y niñas que no asisten presencialmente.
6.- INDUCCIÓN
Capacitar al personal educativo para que conozca los protocolos y medidas a implementar.
7.- COMUNICACIÓN CON LAS FAMILIAS
Hacer partícipe a los apoderados del proceso de definición de protocolos y de la organización de la jornada, fortaleciendo la confianza en el retorno presencial de niños y niñas.